Fuente: El confidencial.
Hablamos de una redefinición de la figura del fiscal, estableciendo un diseño que destierre toda posibilidad de ejercer influencia política sobre la institución
Como la modernización de la Justicia es uno de esos debates recurrentes en España, también lo son los olvidos, por ejemplo, la verdadera independencia del Ministerio Fiscal. Hablamos de una redefinición de la figura del fiscal, estableciendo un diseño que destierre toda posibilidad de ejercer influencia política sobre la institución. Lo diré de una forma más directa aún: no puede haber modernización de la Justicia sin una clara independencia de la Fiscalía porque solo así conseguiremos eliminar las dudas y las descalificaciones de las que somos objeto los fiscales entre la ciudadanía; un prejuicio muy dañino para la imagen del Poder Judicial en su conjunto.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Justicia, Dolores Delgado. (EFE)
El Ministerio Fiscal no debiera verse nunca afectado por suspicacias o contiendas partidistas. Punto. La aspiración de la carrera fiscal es la defensa de la legalidad, de los derechos de los ciudadanos y del interés público tutelado por la ley, que es lo que prevé su estatuto. El fiscal, que está integrado con autonomía funcional en el Poder Judicial, tiene como misión destacada la de velar por la independencia de los tribunales, sometido a los principios de legalidad e imparcialidad. De ahí viene todo, de ese principio fundamental: mal andamos en España si se duda de la imparcialidad del órgano que tiene como misión velar por la independencia de los tribunales, y por ende del Poder Judicial.